¿Cómo se elabora el Champagne?
En un inicio, se siguen procesos parecidos a los de un vino convencional, por lo que se debe primero ejecutar el proceso de prensado después de la vendimia, donde se utilizan uvas completas o enteras.
Es importante considerar que el prensado debe ser suave y progresivo, para luego entonces proceder a fraccionar los jugos que se obtienen de este proceso.
Una vez se han conseguido los jugos de las uvas, se debe comenzar con el proceso de fermentación, donde se convierte en vino tranquilo y no espumoso.
Luego se debe realizar el proceso de embotellado. Posteriormente, son colocadas en la oscuridad para que fermente y esa espuma que produce es lo que lo convierte en champán.
Tipos de uvas usadas
Para la elaboración del champagne, las uvas más empleadas son las siguientes:
- Las Pinot Meunier tienen menos carácter que las Pinot Noir y se caracterizan por aportar un increíble sabor afrutado.
- Las Pinot Noir es una uva que destaca por aportar mucho cuerpo y carácter al espumante, además de longevidad.
- Por último, las uvas de Chardonnay son las que le aportan un gran frescor y ligereza.
Clasificación del Champagne según el azúcar
Este tipo de licor se caracteriza por contener diversa cantidad de azúcares, luego del segundo proceso de fermentación y añejamiento. Dentro de los tipos que surgen de esa cantidad de dulzura están:
- El Brut Nature que cuenta con hasta un máximo de 3 gramos por litro.
- El Extra Brut contiene hasta unos 6 gramos por litro.
- El Brut puede llegar hasta 15 gramos por litro.
- También está el Extra Seco que contiene de 12 a 20 gramos por litro.
- Le precede el Seco o Sec que contiene entre 17 y 35 gramos de azúcar por litro.
- El Semi Sec o Demi-Sec cuenta con 33 a 50 gramos de azúcar por litro.
- El Dulce o Doux contiene más de 50 gramos por litro.
Diferentes tipos de Champagne
Otra de las maneras en las que se pueden catalogar los champán, incluye una diferenciación de las uvas que se emplean en el proceso. Es por ello que se pueden conseguir los champán Blanc de Blancs que es donde intervienen sólo uvas blancas.
Por otro lado, están los Blanc de Noirs que incluye en el proceso de ensamblaje al menos una o dos de las uvas tintas, hablamos de las Pinot Meunier o Pinot Noir, sin Chardonnay.
Por último, están los rosados.