Tomates

Muchos procesos de conservado se mantienen de forma tradicional, mientras que otros aplican técnicas más industrializadas. Sea cual sea el que usemos, obtener tomates en conserva es una excelente manera de disfrutarlos.

Los mejores tomates en conserva son los que vienen en aceite de oliva. Ideal si además son los tomates cherry, ya que lo concentrado de su sabor junto con la potencia del aceite de oliva será única. Así que si quieres disfrutar de las mejores opciones deberás seguir nuestra recomendación. Se trata de un producto gourmet que sabrá acompañar tus mejores vinos reserva.

¿Qué son los tomates en conserva?

Es un mecanismo o forma que se emplea para lograr que ciertos alimentos, en este caso los tomates, se mantengan por más tiempo. Dicho con otras palabras, el mecanismo que se utiliza consigue que los tomates duren mucho más tiempo que en condiciones normales.

Entre las formas de conservar están los asados, los fritos o al natural (en crudo). Cada uno de los procesos cuenta con pasos diferentes para conseguir el resultado y aportan diferentes sabores y texturas al producto.

¿Cómo se preparan los tomates asados en conserva?

Lo primero es determinar qué tipos de tomates se usarán, si los normales o los cherry. Una excelente idea es usar ambos tipos. La diferencia en texturas y tamaños provocará un gran efecto en boca.

Se deben poner a cocinar en una olla con al menos unos 100 ml de aceite de oliva. Este paso es fundamental porque no solo los cocina y aporta mucho sabor, sino que además ayuda en el proceso de conservación.

Los tomates pueden ir acompañados de otros elementos como cebollas, ajos o algunas hierbas aromáticas como el romero o el tomillo. Todo dependerá del sabor que se desee obtener. Una vez estén cocinados se deberán guardar en un frasco hermético, cubiertos de aceite.

¿Cómo se preparan los tomates fritos en conserva?

Lo primero y más importante es comenzar por pelar los tomates, para eso se deben escaldar ya sea de forma mecánica o manual. Luego será necesario pasarlos por el pasa puré o la batidora.

Una vez que conseguimos una pasta o crema espesa, deberemos colocarla en un sartén con un poco de aceite caliente. Puede ser aceite de oliva o el de tu preferencia.

Puedes agregarle incluso otros ingredientes que ayuden a aportar más sabor, como por ejemplo cebollas, ajos, o cualquier otro aditivo o incluso especias de tu preferencia.

Luego solo deberás colocarlo en frascos de vidrio, pero no completamente llenos, tapar y calentar al baño maría durante unos 20 minutos, y listo.

¿Cómo se preparan los tomates crudos en conserva?

Lo más relevante es comenzar por limpiar los tomates, pelarlos y luego escurrirlos muy bien. Una buena recomendación es tratar de eliminar la mayor cantidad de semillas posible.

Una vez que se hayan limpiado es necesario escaldarlos, por lo que se deben colocar en agua hirviendo. Después de unos 15 minutos retirar del fuego, dejar escurrir y proceder a cortar los tomates en trocitos.

Al igual que los anteriores, los colocamos en frascos de vidrio sin llenar por completo, para después taparlos y poner al baño maría por un lapso de 20 minutos.