El arroz con carne es un plato que casi nunca falla en la mesa
Hay tantos vinos, cada uno con sus propios aromas y especificidades, como arroces o preparaciones con esta base. Por ello, es factible perderse en la selección del vino perfecto para tus arroces.
Lo que no sabemos muy bien es con qué vino lo podemos acompañar y si el arroz está preparado con carnes, la elección se hace más delicada. Veamos cómo resolverlo.
La forma en la que se ha cocinado el arroz determina el tipo de vino para maridar, pues no es lo mismo un arroz seco con carne, que uno caldoso o meloso.
Por ejemplo, el arroz frito con carne es una manera fácil de utilizar las sobras de arroz y las verduras que tienes en la nevera. En este caso, es fundamental que elijas un buen vino para que destaques esta preparación. A pesar de que este arroz con carne se puede hacer en menos de 30 minutos, su exquisito sabor lo hace merecedor de un buen vino Navardia Joven.
Con qué vino acompañar el arroz con carne
El maridaje entre el vino y el arroz con carne, puede no parecer la opción más obvia del mundo. Esta comida dista mucho de ser homogénea. Por eso es un reto encontrar un vino que pueda equilibrar la complejidad de sus sabores. Aquí, te daremos algunos consejos sobre lo que va mejor con una variedad de opciones.
Ya sea a la barbacoa, asada al horno o en salsa, hay varias formas de cocinar la carne para resaltar sus sabores. Desde la carne roja hasta la de caza y la de ave, la carne se presta a multitud de recetas.
La carne se sirve generalmente con verduras o con arroz. Algunas carnes, como el conejo o el cordero, van maravillosamente bien con frutas como las ciruelas pasas o los higos. En este sentido, contrastamos con un vino intenso y persistente de aromas a frutas rojas y negras como es el vino LegaSea o el Garnachas de España: Salvaje, Olvidada y Fosca Priorat.
El maridaje entre el vino y el arroz con carne puede parecer difícil con tantos sabores a los que enfrentarse. Dependiendo de la receta, puede llevar picante, dulce, ácido, salado o amargo; y en algunas ocasiones todos estos sabores pueden estar presentes en un solo plato, como en el arroz chino. En este caso, se sugiere un vino Antoñita Tinto o un Tobía Cuvé, que puedan soportarlo.