El estofado y los vinos, una combinación perfecta
El estofado es una comida deliciosa, que servida con un buen vino adquiere propiedades aún más exquisitas y procura un ambiente especial. Logra que la velada deje un recuerdo inolvidable.
Una carne deliciosa, preparada en su mismo jugo, hasta llegar al punto perfecto de cocción. La armonía entre los aromas de los aliños, verduras y demás ingredientes hace que nuestras papilas gustativas se activen para degustar un exquisito estofado. Lo único que falta para que sea ideal es un buen vino, preferiblemente tinto.
Generalmente, se prepara con cortes de carnes rojas cocidas por un largo período de tiempo, usualmente usando algún vino como caldo para cocinarlo todo. Esta combinación de sabores requiere de un acompañante, que limpie y prepare el paladar para que cada bocado se pueda degustar de forma adecuada.
Este es un trabajo que asumen perfectamente los vinos, que al tratarse de carnes rojas, se eligen tintos, de buen tanino, estructurados y acidez equilibrada. El caldo en cuestión se recomienda añejo, para que tanto los aromas como los sabores propios estén maduros y pulidos, y puedan ofrecer sus mejores cualidades, otorgándole una armonía perfecta.
En algunos casos, y si la receta lo permite, es posible maridar un estofado con un vino tinto de Crianza, siempre que entre sus cualidades encontremos una buena capacidad de envejecer. Esto promete que su astringencia sea adecuada para secar el paladar y prepararlo para los sabores de la carne.
Vino Tinto Gran Reserva
Por supuesto, se trata de la mejor elección. Un vino Tinto Gran Reserva posee una elegancia única desde la misma copa, con un color que de entrada hace una buena combinación en mesa con las carnes rojas.
Son de aromas maduros e intensos, con notas de madera, tostados y especias, muy propios del tiempo en barrica. Lo más trascendental es su paso por la boca, ya que sus taninos por lo general dulces, favorecen la astringencia y permiten secar el paladar limpiando las grasas.
Nuestra recomendación en este caso es el Usoa de Bagordi Gran Reserva, un vino de 24 meses en barrica y 36 en botella que ofrece notas aromáticas de vainilla, cacao, especias, frutas y amaderados, con un sabor redondo y con cuerpo, cualidades ideales para cualquier plato preparado con todo tipo de carnes rojas.
Vino Tinto Crianza
Como ya mencionamos, algunos vinos tintos Crianza tienen lo que se necesita para maridar con un buen estofado. El Vina Maris Selected, por ejemplo, pasa 16 meses en roble y luego otros 12 bajo el mar perfeccionando sus cualidades, convirtiéndose en un caldo de excelente calidad. Así está listo para servirse en la mesa junto a este plato y hacer de la velada un momento perfecto.